1. Torre Bellesguard
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Vamos a empezar con una de las atracciones, de la que seguramente ya habéis oído hablar, y que nosotros ya hemos comentado con anterioridad: la Torre Bellesguard. Esta villa es una de las muchas maravillas de Gaudí, diseñada por el arquitecto entre 1900 y 1909 y está situada a los pies del monte de Collserola.
Este edificio siempre ha sido de propiedad privada desde 1944, pues era y es el hogar de la familia Guilera. En el pasado, la familia dejaba solamente visitar los jardines de la propiedad, pero desde septiembre de 2013 permiten visitar el interior del edificio (excepto, por supuesto, de la residencia privada de la familia que todavía vive allí). Por este motivo, aquellos que a menudo visiten la Torre podrán toparse con los miembros de la familia paseando por el jardín.
Esta torre, aunque menos conocida que otras obras del arquitecto, ¡se merece una visita! A los amantes del estilo gaudiniano les encantará e, incluso en este edificio de clara reminiscencia gótica, el misterioso simbolismo de Gaudí está patente y, además, ¡se puede disfrutar de una de las mejores vistas panorámicas de la capital catalana!
Cómo llegar
La Torre se encuentra en la calle Bellesguard, 16-20 y se puede llegar desde el centro de Barcelona con las líneas de autobús 58, 22 y 90 o en ferrocarril FGC Línea L7 (estación Av. Tibidabo) y desde ahí coger el bus 196. Para los que quieran, el autobús turístico (Barcelona City Tour - Visita al este) también realiza una parada cerca de la Torre. Para todos los detalles, como horarios y precios visita la página oficial.
2. Monasterio de Pedralbes
Este monasterio se encuentra en el barrio homónimo y es una joya del arte gótico que, lamentablemente, todavía sólo unas pocas personas conocen. Fue construido en 1326 por orden del rey Jaime II y de la reina Elisenda de Montcada para albergar la orden de monjas clarisas, que todavía vive allí.
Se encuentra en una zona residencial muy tranquila. Una visita al interior del monasterio permite a los visitantes una mayor comprensión de la vida de las monjas, cómo vivían y cómo pasan sus días en la actualidad. El patio interior es muy agradable para pasear, pues hay un pequeño jardín con una fuente y un huerto a cargo de las propias monjas.
Puedes recorrer las instalaciones con audio-guía o participar en visitas guiadas. Te recuerdo que la visita al monasterio, al igual que en muchos otros edificios y museos, es gratuita el primer domingo de cada mes y cada domingo a partir de la 15h.
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Cómo llegar
Es muy fácil llegar al monasterio. Desde Plaza Universitat (al lado de Plaza Catalunya), o más bien desde la cercana Calle Aribau puedes tomar las líneas de autobús 64 o 68 que te llevan directamente a la Plaza de Pedralbes. Desde allí se puede llegar al Monasterio de Pedralbes en menos de 5 minutos a pie. Otras opciones de transporte son: autobús líneas nº 22, 63, 75 o en ferrocarril - L6 (parada Reina Elisenda).
3. Parc de Pedralbes
Un poco más al sur del Monasterio, se encuentran los Jardines de Pedralbes (Jardins del Palau de Pedralbes), un paraíso conocido por pocos. Este parque tiene sus orígenes en una finca de la familia Güell, más tarde vendida en 1920 para permitir la construcción de una residencia destinada a la familia real. Actualmente, en el edificio están ubicados el Museo de Artes Decorativas y el Museo de Cerámica.
Estos jardines fueron también diseñados por Gaudí: se puede identificar su marca en las farolas ocultas entre los árboles, en las pérgolas cubiertas de vides, y en la fuente de Hércules, donde se encuentra una cabeza de dragón de hierro forjado. Además, al lado del parque, se encuentra otra obra del arquitecto: una parte de la antigua finca Güell, precedida por una puerta grande con un dragón en hierro forjado y dos pabellones diseñado en estilo trencadís, es decir, con azulejos de cerámica de colores.
Si te gusta la naturaleza y la tranquilidad, este parque es perfecto para dar un paseo relajante, lejos del bullicio de la mayoría de los parques turísticos de la ciudad. Es rico en vegetación, arte, arquitectura y muy recomendable para pasar una tarde agradable con amigos, familia o en pareja. El parque está abierto todos los días desde las 10h hasta la puesta del sol (entrada gratuita).
Además, en este parque se celebra cada año un festival de música donde la naturaleza, la historia, la música y la gastronomía se unen para crear un ambiente único: el Festival Jardins de Pedralbes.
Cómo llegar
El parque está situado en la Avenida Diagonal, 686. Las entradas al recinto son tres: En Avenida Diagonal, por Pere Duran Farell y por la Calle Tinent Coronel Valenzuela. La forma más rápida y más fácil de llegar es tomando la línea verde (L3) del metro desde Plaza Catalunya y bajar en Palau Reial.
4. El Turó de la Rovira
El Turó de la Rovira, espectacular mirador, está situado en el barrio del Carmel, y es un activo espacio donde se hallan los restos de un refugio antiaéreo (incluyendo varios bunkers) construido durante la Guerra Civil Española para defenderse de los ataques de los fascistas en Barcelona. Tras el final de la guerra construyeron chozas que dieron origen a lo que se llamó el barrio de los Cañones y permaneció así hasta los años 90. Posteriormente, este lugar fue utilizado por diferentes servicios de infraestructura, como la instalación de tanques de agua y torres de comunicaciones.
El mirador permaneció cerrado al público durante un tiempo, mientras se estaba restaurando, pero actualmente está abierto al público todos los días y ofrece a los visitantes una espectacular vista de 360 grados de toda la ciudad. Es un lugar mágico y perfecto para disfrutar de la capital catalana al atardecer. ¡¡Los amantes de la fotografía no pueden perderse este espectáculo!! Aconsejo ir de lunes a viernes para evitar el ajetreo de los fines de semana. Aunque la vista es maravillosa durante todo el día, sin duda, la atmósfera de la puesta de sol le da un toque aún más mágico. Ah, ¡la entrada es gratis!
Cómo llegar
Este mirador, a diferencia del Tibidabo o el Park Güell, no es frecuentado por muchos turistas, porque no es fácil de llegar si no se puede ir en coche, pero tranquilo, ¡que se puede llegar igualmente! Desde la Plaza Catalunya puedes coger la línea 3 del metro (línea verde) y bajar en Vallcarca. Desde aquí coges el autobús V17 que te lleva cerca del Mirador. Otras líneas de autobús son las líneas 24, 92 y 119, pero la mejor solución es, en mi opinión, la primera. Tiempo requerido: 40-45 minutos.
5. Restaurante Asador de Aranda Tibidabo
Tras los parques, las vistas panorámicas y el senderismo ... ¿quién no quiere comer bien? :) Así que, para que no tengas que desplazarte de la zona alta de Barcelona, te recomiendo un restaurante ahí mismo: el Asador de Aranda Tibidabo. Este restaurante está situado en la Avenida del Tibidabo, una calle de estilo modernista donde hay muchas villas de principios del siglo XX. En una de estas villas, Casa Roviralta (construida entre 1903 y 1913 por el arquitecto Joan Rubió i Bellvé), se encuentra precisamente este restaurante.
El restaurante está situado en una posición estratégica, muy elegante y muy bien cuidado. Nada se deja al azar y todos los platos son tratados minuciosamente, desde la presentación hasta su gran sabor. ¡Pruébalos!
Cómo llegar
El Asador está situado en la Avenida del Tibidabo, 31. Desde la Plaza Catalunya toma el ferrocarril (L7) hasta el destino final (Av. Tibidabo). Desde allí puedes ir al restaurante a pie en 10 minutos.
Te informo también que esta zona también ofrece un montón de aparcamiento gratuito donde puedes dejar el coche durante todo el tiempo que desees, incluso durante toda la semana. Hay muchas calles con estacionamiento libre y si quieres llegar al centro de la ciudad, puedes usar el transporte público.
Espero que todas estas ideas te hayan gustado y te hayan despertado las ganas de descubrir la zona alta, burguesa y escondida de Barcelona! ;)
