La anécdota
Hace unos días en un tren de Barcelona camino a Sabadell un hombre de unos 50 años cargado únicamente con su vieja, vieja, vieja guitarra se puso a tocar la canción Entre dos aguas de Paco de Lucía. Cerró los ojos y simplemente la interpretó con dedicación y delicadeza. Cuando terminó, los abrió y se sorprendió al ver que las cuatro personas que viajaban en el vagón habían estado mirándole y ahora aplaudían. Él, al borde de la emoción, dio las gracias y no pudo evitar reconocer que era la primera vez que no solo le hacían caso, sino que además le sonreían y aplaudían. “Generalmente la gente te ignora o no separa la vista del móvil”, dijo.
Están entre nosotros, te ven pasar, los escuchas, tú sabes que están ahí, ellos saben que los estás escuchando, así que ¿por qué ignorarlos? Quizá esto esté cambiando. En Internet últimamente se viralizan vídeos en los que músicos y cantantes consiguen animar a todo un vagón del metro. Mientras tanto, y aunque no salgan en YouTube los músicos han estado, están y seguirán siempre entre nosotros. Aunque no tengas una moneda en ese momento, a veces con una sonrisa es más que suficiente.
La Asociación de Músicos
A finales de los años 90 y comienzos del 2000 un grupo de ellos se unieron y crearon AMUC BCN (Associaciò de Músics del carrer i Metro de Barcelona) asociación para organizar y armonizar a los músicos que tocaban en el Metro de Barcelona. Pusieron sobre papel una realidad evidente: ¿Qué pasaba con los músicos del suburbano? Comenzaron a mantener encuentros con TMB (Transports Metropolitans de Barcelona) y llegaron a buen puerto. Aún así se definen como una asociación independiente de las instituciones, sin ánimo de lucro y que sólo se gestiona con las cuotas anuales de sus socios. Prefieren no responder ante nadie que coarte las decisiones tomadas en las asambleas que llevan a cabo cada dos semanas.
Según definen en su página web: “La principal motivación de nuestra existencia se basa en cultivar la empatía, la complicidad, la armonía, la solidaridad y la unión en la diversidad dentro de un grupo humano multicolor, y apasionante como es sin duda el colectivo internacional de músicas y músicos del metro de Barcelona”.
¿Quieres tocar en el metro?
Algo que mucha gente no sabe es que para tocar en el metro hace falta pasar una prueba de idoneidad. Los socios de AMUC lo argumentan como que del mismo modo que no contratarías a un carnicero para que te haga una operación de apéndice, un músico debe serlo de verdad y demostrar que puede estar tocando durante el turno de dos horas que le corresponda sin repetir canciones ni molestar a los trabajadores del metro que quizá tengan que estar pasando a menudo frente a él. El jurado que valora la aptitud de cada aspirante está formado por profesores de una escuela de música de Barcelona. Estos habrán de comprometerse a ser totalmente independientes y ajenos al proyecto y no involucrarse en él con el fin de contar con su total imparcialidad.
Los Músicos de las calles Barcelona
Durante el día, los fines de semana especialmente, bajo el sol que nunca abandona la Ciudad Condal, rumba, guitarreo, blues al estilo Bob Dylan, trompetas, trombones, percusión... Infinidad de músicos alegran las mañanas de compras y vermut. Suelen estar en la mítica calle de Portal del Ángel o por el puerto y la playa. Estos artistas son lo suficientemente hábiles como para situarse en puntos amplios donde poder congregar a un buen puñado de gente. El resultado: Conciertos improvisados y muchedumbres aplaudiendo, bailando y sonriendo.
Y a medida que va atardeciendo en Barcelona, cuando la luna empieza a asomar, es cuando la magia de la música aparece a pie de calle en la Ciutat Vella. Esas noches de entre semana, sin la afluencia masiva de turistas, es cuando más se puede disfrutar de un paseo por los alrededores de la catedral. Cobijados por los muros de la antigua Barcelona, cantantes de ópera, violines y guitarras dotan de alma al barrio gótico. Pasear por esas callejuelas mecido en tan relajante banda sonora es, en mi opinión, la única forma de vivir de forma plena la ciudad.
Problemas con la guardia urbana de Barcelona
Infelizmente, en los últimos meses se han venido recogiendo protestas de algunos de estos músicos por problemas con la guardia urbana y mossos de escuadra. Denuncian requisamiento de instrumentos y muchas trabas a la hora de ejercer su derecho a expresarse libre y musicalmente en la calle. Según una noticia del periódico.com, entre el 2011 y el 2015 se decomisaron más de 2.000 instrumentos en Barcelona.
La ley en Barcelona permite a los músicos situarse en 23 puntos de Ciutat Vella. Los horarios son entre las 12:00 y 14:00 y de 17:00 a 19:00. No podrán estar tocando más de dos horas seguidas. Para ello los artistas necesitan solicitar una acreditación al Distrito de Ciutat Vella que suelen concederlas durante el mes de diciembre en el Centro Cívico Convent de Sant Agustí. Se sortean un máximo de 140 permisos al año.
Legislación en otras ciudades: (New York, Londres, Madrid)
En New York es un privilegio tocar en alguno de los 25 puntos del metro donde se permite hacerlo oficialmente. Los músicos allí pasan un casting como si de un show televisivo se tratara. También se hace un poco la vista gorda si alguien ocupa otros lugares con su instrumento, siempre que no moleste a los oficiales que pasaron la prueba. Central Park es otro de los sitios emblemáticos donde ir a escuchar a los músicos callejeros de Nueva York.
En Londres los aspirantes a tocar el metro también tienen que pasar una rigurosa prueba presidida por cazatalentos y profesionales de la industria musical. Dicen que su Underground es un icono de la música callejera en el mundo. Estos artistas están muy bien vistos y apreciados. Cada año se hace un concurso en el que los músicos tocan durante el día, suben sus actuaciones a la red y la gente vota por los mejores.
Con la llegada del nuevo Ayuntamiento a Madrid liderado por Manuela Carmena se han suprimido los castings que propuso el anterior consistorio y por los que tanto protestaron los músicos callejeros en la capital. Ahora, el que desee tocar en las calles de esta ciudad deberá presentar su currículum en el ayuntamiento y estos procederán a estudiar su solicitud. Cabe destacar una anécdota que se vivió en la famosa calle Preciados cuando el conido cantante Mike Rosenberg, “Passenger” fue multado por la policía cuando se disponía a hacer una actuación sorpresa para promocionar su nuevo disco. Ya lo había hecho en Glasgow, Sydney o Londres, pero aquí no duró ni 20 minutos.
En Santiago de Compostela por su parte tienen muy controlados a los gaiteros. Al ser un instrumento tan típico de la región, así como estridente, la ley permite que haya un máximo de seis gaiteros tocando simultáneamente en toda la ciudad. Y en Bilbao, solo se concede una actuación por lugar al día. Vaya que si ha estado tocando un trompetista en un punto de la ciudad a la mañana, ni se te ocurra ir al mismo sitio con tu guitarra a la tarde.
Vídeo
Como cantaba Fito en un tema de Platero y tú, “Maldigo a todos esos locos que quieren gobernar la vida sin las palabras del poeta y sin las manos del artista”. El arte forma parte de nosotros y la música se convierte en la esencia de nuestros lugares y viajes. Solo escuchar una canción ya te hace viajar y si algo nos gusta en Ok Apartment es que vengas a disfrutar al máximo de nuestra ciudad.
Así que, cuando vengas dinos, ¿A qué te suena Barcelona? Si ya estuviste: ¿A qué te sonó? Y si al leer esto estás recordando algo... ¿A que te suena lo que recuerdas?
A mí me suena así. En este vídeo canto una canción que compuse para mis amigos de Barcelona, en una ocasión que tuve que marchar. Es un homenaje a la ciudad, a lo que vivimos entre sus calles y a todo lo que, cada vez que suenen estos acordes siempre me hará recordarlo. Las imágenes son un repaso de lo que he hecho este año gracias a esta empresa desde la que te hablo.
Título de la canción: Barcelona con Cosas
Autor: Asier Suescun
Letra:
Cuando tu vida es viajar
cuando el mundo es tu hogar
puede ser
que quieras parar tus pies
en esta ciudad.
Rabla pa'rriba Rambla pa'bajo
subes a Gracia por Enrique Granados.
Nits a la fresca, Montjuic queda cerca.
Picnics de 'vespra'
en la Ciutadella.
Recuerdas aquel bar
pide cuatro estrellas más
que ya es hora de chapar
y aún queda todo el Raval.
Vas borracho ¡Qué más da!
Pilla una birra más
a ese 'paqui' que va a sacar
de la papelera otro pack.
Y este finde a cenar.
Tu casa se va a llenar
de isleños y patxarán,
un manchego y mucho catalán.
Muchas risas caerán
mucho humo llenará
tu salón,
que mañana de resacón
solo limpiarás.
Pero tienes que marchar,
el viaje vuelve a llamar.
Una más y otra que vendrá
Cientounvidas vivirás.
Los amigos seguirán,
la ciudad se quedará,
la experiencia nunca jamás borrarás
y ahora vienen más.
